El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) es el organismo adscrito al Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, encargado de la gestión de las prestaciones por desempleo y otros beneficios sociales.
Las prestaciones por desempleo son una serie de ayudas económicas que tienen como objetivo facilitar la inserción en el mercado laboral a aquellos trabajadores que se encuentran en situación de desempleo.
Requisitos para recibir prestaciones por desempleo
Para acceder a estas prestaciones, los trabajadores deben cumplir unos requisitos, entre los que se encuentran:
-Estar inscrito como demandante de empleo en el SEPE.
-No estar en situación de alta o baja médica.
-No estar cobrando otras prestaciones por desempleo o subsidio por desempleo.
-No estar realizando una actividad remunerada.
-No tener ingresos superiores a determinados límites.
-Cumplir con el período mínimo de cotización.
Las prestaciones por desempleo se clasifican en dos tipos: prestaciones contributivas y prestaciones no contributivas.
Prestaciones contributivas
Las prestaciones contributivas son aquellas que se financian con las cotizaciones a la Seguridad Social de los trabajadores. Para acceder a estas prestaciones, es necesario haber cotizado un mínimo de 360 días en los últimos 5 años.
Las prestaciones por desempleo contributivas se dividen en tres tipos:
–Prestación por desempleo: es la prestación más común y se otorga a aquellos trabajadores que han perdido su empleo por causas ajenas a su voluntad.
–Subsidio por desempleo: es una prestación más elevada que la prestación por desempleo y se otorga a aquellos trabajadores que han perdido su empleo por causas ajenas a su voluntad y que cumplen determinados requisitos, como tener hijos a cargo o estar en situación de incapacidad permanente.
–Prestación por cese de actividad: es una prestación temporal que se otorga a aquellos trabajadores que han dejado de realizar su actividad por causas ajenas a su voluntad, como un ERTE o un cierre de empresa.
Prestaciones no contributivas
Las prestaciones no contributivas son aquellas que se financian con fondos públicos y no requieren cotizaciones previas. Estas prestaciones están destinadas a aquellos trabajadores que no reúnen los requisitos para acceder a las prestaciones contributivas.
Las prestaciones por desempleo no contributivas se clasifican en dos tipos:
–Prestación por desempleo no contributiva: es una prestación mensual que se otorga a aquellos trabajadores que no reúnen los requisitos para acceder a las prestaciones contributivas.
–Subsidio por desempleo no contributivo: es una prestación mensual más elevada que la prestación por desempleo no contributiva y se otorga a aquellos trabajadores que no reúnen los requisitos para acceder a las prestaciones contributivas y que cumplen determinados requisitos, como tener hijos a cargo o estar en situación de incapacidad permanente.